miércoles, 29 de junio de 2016

Atravesamos cielos siempre azules
y surcamos océanos indómitos,
pero quién nos da la garantía.
Arrasamos selvas vírgenes,
vírgenes del amor verdadero.

Magos de lo invisible nos acompañan
y nos transmiten su mensaje
envuelto en cascadas sonoras
donde la más minúscula hoja
repite incesante su canción.
Me acuna y acaricia el viento,
y mientras su sosiego me doblega
y me abandono a su placer,
la sombra amarga de lo intangible.

Quién nos ofrecerá la garantía.

Y eternamente adolescente
seguiré alimentando el amor indomable...
buscando
seguiré incansable,
pagando la culpa que contraje en otra vida.

jueves, 23 de junio de 2016

Mi miedo y yo


El camino,
y entonces mi miedo y yo.

Las palabras, 
y entonces mi miedo y yo.

El sentir, 
y entonces mi miedo y yo.

No lo merezco, 
yo no lo valgo.

Y, ahora sí,
el camino se torna escarpado.

Acacias, orquídeas, tréboles,
fuentes y frutos y ramas,
la hoja perdida del avellano. 

Y mi miedo y yo.

Troncos,
 barrancos y valles.

Y mi miedo y yo.

Entonces la veo
planear sinuosamente sobre nuestras cabezas,
y descubro que debo llevarle de la mano,
a mi miedo,
a mi ego.

El camino será aún más rocoso y empinado,
pero no habrá nada comparado
a saberme en el camino acertado.

martes, 14 de junio de 2016

Humor errado

Un te quiero venido de otro mundo
que calló en circuito cerrado.

Venas, músculos y carnes ensangrentadas
cumpliendo su función
en jaula de huesos encerradas.

Palabras informes desubicadas.

Palabras dementes perdidas
en un paso abandonado del tiempo.

Un te quiero tergiversado,
llegado de otro mundo,
equivocado, perdido...
en sus letras no hallarás más
que la cordura que lo conformara antaño
abandonada a su propia locura.

Ya no recuerda a qué vino,
y se desgarra al son de su eco
envenenado de humores y sabores
que le atormentan en su propio recuerdo.

Soledad.