Unas manos que estrechan,
que te estrechan.
Manos en busca de unas manos a las que agarrarse.
Manos al aire intentando asirse a lo que sea
con tal de no hundirse...
de no ahogarse...
De no ahogarse en una inmensidad que asusta
por desconocida, por incomprendida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario